Marco Antonio Mendoza Bustamante asume el liderazgo estatal del PRI en Hidalgo en un momento crítico para su partido. Su juventud y energía representan una perspectiva fresca para encarar los desafíos que se presentan. Sin embargo, está consciente de la ardua labor que le espera, pues debe unificar a un partido fragmentado y alejarse de prácticas del pasado, como las imposiciones y simulaciones. Bustamante se ha embarcado en la misión de unificar al partido, dejando atrás las viejas prácticas y apostando por una verdadera democracia interna. Su liderazgo ha generado un sentido de esperanza y renovación entre los militantes, quienes ven en él la posibilidad de construir un PRI más incluyente, abierto y cercano a la ciudadanía.
Desde su llegada a la dirigencia estatal, se ha promovido un discurso de apertura en el partido, respaldado por la secretaria general, Jenny Márquez. El dirigente ha trabajado en reunificar al Partido Revolucionario Institucional (PRI) después de la desbandada del autonombrado grupo plural independiente liderado por el ex gobernador y expriista Omar Fayad Meneses, que incluyó desertores del Tricolor en el Estado de Hidalgo.
El reto es significativo, ya que implica dejar atrás las imposiciones y priorizar un análisis profundo de la militancia para identificar a quienes verdaderamente tengan méritos para contribuir al partido. Se busca eliminar prácticas como los “dedazos” y las simulaciones en el proceso de selección de líderes.
Recientemente, la dirigencia estatal encabezada por Mendoza Bustamante ha realizado algunos nombramientos en los comités municipales y la estructura del partido a nivel estatal. Algunas de estas designaciones incluyen a Miguel Ángel Romero Olivares como secretario de operación política, Martín Hernández Rivera como secretario de acción electoral, Martín Quesada Salvador como secretario de afiliación y registro partidario, Leticia Chapa Guerrero como secretaria adjunta a la presidencia, Bernardo Arista Velasco como secretario adjunto a la presidencia, Liliana Verde Neri como secretaria de gestión social, Isaac Aramer Lozano Trejo como secretario jurídico, y Carlos García Monzalvo como presidente del movimiento «PRI MX». También se han designado a Francisco Javier Vargas Pacheco como presidente del comité municipal en Mineral de la Reforma e Irma López Vázquez en el comité municipal de Omitlán.
Aunque se han logrado avances, aún queda un largo camino por recorrer para fortalecer la estructura del PRI en Hidalgo. Es importante que los diferentes sectores y organizaciones, que históricamente han sido pilares del partido, tengan líderes comprometidos.
En relación con la CNOP estatal, se perfila Jesús Gutiérrez González como una figura destacada. Ha ocupado durante varios años el cargo de Secretario de Organización, y su trayectoria empresarial y comercial es ampliamente reconocida, de trato amable y cordial. Estas cualidades le han otorgado un considerable capital político, lo que lo posiciona como el candidato natural. Es relevante mencionar que anteriormente, el sector era dirigido por Héctor Meneses, primo del ex priista Omar Fayad.
En cuanto a la CNC, Raúl Meneses Rodríguez lidera actualmente esta organización, siendo también primo del ex gobernador de Hidalgo. Es fundamental tener en cuenta que los miembros influyentes de este sector han sido históricamente los «Rojo», quienes podrían desempeñar un papel crucial en la reagrupación y fortalecimiento de esta importante facción del priismo.
En lo que se refiere a la CTM, Jesús Pliego Calva ostenta un cargo vitalicio. Anteriormente, ocupó el puesto de suplente en la fórmula cuando Omar Fayad Meneses fue senador y llego al Senado cuando este último llego a la gobernatura. Sin embargo, en este momento, se debe considerar su permanencia, ya quien realmente despacha es Mario Baños Briseño, quien ha demostrado una lealtad constante a los colores del partido.
Además, se mencionan algunos organismos especializados, como el Instituto Jesús Reyes Heroles, suena Arnulfo Cruz Heras quien parece ser un candidato adecuado para dirigirlo, pues se le ha visto activo en el tema de capacitaciones y formación. En la Fundación Colosio, Osiel Serrano Salazar ha realizado un trabajo aceptable, sin embargo, es primo hermano de Onesimo Serrano, habrá que evaluar el trabajo o visualizar la posibilidad de un cambio y renovación en el liderazgo. En cuanto a las organizaciones adherentes, Jaime Galindo lidera el Movimiento Territorial, ha demostrado experiencia política, por sus diferentes cargos actualmente lidera una agrupación de expresidentes municipales, lo que le valdría la permanencia en esta cartera. La diputada federal Johanna Monserrat Hernández Pérez está al frente del OMPRI y ha demostrado su liderazgo en diferentes momentos, lo que le valdría poder unificar a las mujeres priístas en la entidad.
La Red de Jóvenes se encuentra acéfala en este momento, y se propone que el perfil del nuevo líder refleje realmente la voz y las inquietudes de la juventud priísta. Juan Pablo Beltrán Viggiano podría ser un candidato destacado, dado su activismo y capital político en diferentes partes del estado, ya que en la pasada campaña a gobernador se le vio muy activo y con buena aceptación entre los jóvenes. Asimismo, se busca fortalecer la Unidad Revolucionaria mediante la selección de un líder adecuado.
En resumen, la dirigencia estatal encabezada por Marco Antonio Mendoza Bustamante enfrenta el desafío de unificar al PRI en Hidalgo y promover una nueva etapa de apertura y mérito en el partido. La elección de líderes en diferentes sectores y organizaciones juega un papel crucial en el fortalecimiento y renovación de la estructura del partido de cara al 2024 donde será una gran prueba para el priismo hidalguense y esta nueva dirigencia.
